viernes, 6 de marzo de 2009

07 de marzo

Todos los días me levanto pensando en el porqué de esta situación que me confunde, el porque de las cosas es cuestionable a la medida de las circunstancias que pasan en la vida. Yo una viajera de sueños y él solo una figura de contorno, algo inalcanzable para solo esta viajera que hoy escribe un poco. No tengo que ofrecer nada, solo palabras que se desarman en el vacío de los infinitos mundos, solo un poco de aliento para saciar la sed que hoy me quema por dentro como el calor de los mil infiernos que me rodea. Él no percibe, él no se da cuenta de lo que pasa a nuestro alrededor, talvez es un pobre iluso que vaga por el mundo sin darse cuenta de su propósito, de su sentido al caminar por todas las partes de la tierra, solo mirando las cosas que para él importan.

Quizás no era nuestro destino estar en el mismo lugar, en el mismo canal de sintonía donde él oiría lo que tengo que decirle, o talvez solo somos dos extraños que caminamos con rumbos diferentes, pero que en un tiempo del pasado absoluto, fuimos algo más que solo desconocidos.