miércoles, 28 de abril de 2010
28/04/10
Hoy la computadora fue tu amante silenciosa, si tan solo pudieras dirijir la mirada cuando paso a tu lado solo por unos segundos podría de verdad darme cuenta si soy real para ti. Hoy mientras salía de un mundo para ir a otro, abrí la puerta y la sostuve porque vi cuando venias caminando hacia mí, tu no lo notaste al inicio pero en cuestion de segundos volviste tu mirada hacia my y me dijiste gracias con una gran sonrisa mientras la lluvia adornadaba el entorno y el solo eso bastó para que el dia fuera grandioso. Seguias luciendo el morado en la mañana, te esperé en la cafetería como todos los días pero no apareciste nunca... la puerta nunca sonó... Fue triste cuando tuve que ver el reloj y ya daba las 8am, tuve que marcharme y emprender el camino, pero cuando entré al este del otro mundo pude verte en tu silla alta, como olvidabas todo lo que estaba a tu alrededor y ni siquiera te dabas cuenta que yo ya estaba ahi contigo.
martes, 27 de abril de 2010
Un abrigo y un cafe
Con esa inocente sonrisa me sedujiste,
me atrapaste desde el primer momento que te vi
y solo esa sonrisa bastó para que
me hicieras soñar con algo irreal para mi.
Hiciste del morado mi color favorito
aunque el rojo tambien es otro que
tambien haces que sea de mi preferencia
pues con los 2 te mueves dentro del espacio
donde la gente se vuelve invisible a tu paso.
Mientras el café disfruto y veo el humo como se eleva
se abre la puerta que me hace llegar a una nueva
dimension y la adrenalina llega a mi cabeza.
Odio cuando el reloj da las 3,
pues a esa hora es cuando todo empieza
a desvanecer y ha hacerse cada vez mas dificil de ver.
Y mientras camino a tu lado
sin que te des cuenta
contemplo tu rostro como muñeca quieta
en un vitral que no me permite
llegar a donde tu estas.
martes, 13 de abril de 2010
Taxi en abril
Un taxi nos mantuvo dentro esa noche de copas y destierro, fueron mis piernas sobre las tuyas, el calor se sentia invadiendo el ambiente que nos rodeaba. El chofer miro por su ventanilla y vio como yo te persuadía con mi perfume caro y mis labios suaves sobre los tuyos.
En el cuerpo mio estaba el tuyo, manos frías que me rozaban, caricias que quedaban dentro del taxi se perdieron siempre en este abril.
El viaje acaba en nuevos destinos, me miraste loco y confundido, acomodo mis ropas mientras tu seguias jugando mis labios. El taxi nos bajo y se alejaba como el humo del cigarro que juntos gastamos, testigo de todo lo pasado en los sillones y espacios.
En el cuerpo mio estaba el tuyo, manos frías que me rozaban, caricias que quedaban dentro del taxi se perdieron siempre en este abril.
Y las palabras no fueron necesarias, pues los labios estaban hablando otro idioma que solo entendiamos a solas...
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